Slow es una coctelería emblemática de Barcelona con fama internacional, ganadora de numerosos premios a lo largo de los 10 años de trayectoria.
El servicio de Slow es impecable, siguiendo la tradición de la coctelería clásica, a la vez que sus cartas de autor han innovado en la aplicación de técnicas de coctelería evolutiva y la incorporación de ingredientes típicamente asociados a la gastronomía.
La coctelería de autor incorpora gran cantidad de ingredientes de producción propia como extracciones, siropes, purés, licores, maceraciones, etc.